
¡Déjame en paz! ¿Acaso me meto yo con tu forma de vida?
Sí, lo admito, soy algo transhumante, soy absurda, estrambótica y tengo un punto desesperante.
Soy depresiva, ilógica, cursi, finolis, extraña, tragicómica, extravagante, pintoresca, maniática, excepcional, soberbia, etérea y artística. Pero podría continuar mi descripción con un largo etcétera. Simplemente ceso en ello para no aburrirte.
En resumen, no hables de mi si no tienes ni idea de cómo soy en realidad.