Porque me hablaste del amor, porque todo me lo contaste como si no existiera y entonces quería probarle... porque me decías que todo se ponía de colores brillantes y sensaciones únicas, y quería conocerle más y más. Porque reías y cantabas canciones románticas y me hacías suspirar. Porque te elevabas tan alto que quería estar justo así, y observar como se veía todo desde arriba.
Por eso no quiero enamorarme, porque así como te vi subir, te vi caer de golpe.
Te vi llorar a todas horas, te vi ponerte triste al ver parejas hasta por television. Te vi vomitar al escuchar aquellas mismas canciones que me hacían suspirar. Te vi emborracharte y gritarle a las paredes que eras una idiota por haberte creído todo ese cuento.
Por eso no quiero conocerlo, porque cuando más convencida estás de que eso es perfecto... te da la puñalada por la espalda y te convierte en la persona más pobre de sentimientos en un instante.
No quiero enamorarme porque francamente no quiero días de plenitud y una vida anhelando poder llegar otra vez a eso. No quiero extrañar esos días de "gloria"...
No quiero esa farsa y voy a hacer hasta lo imposible por no enamorarme.
Y me vale que digan que es inevitable o que a veces pasa sin que me dé cuenta...
Hay cosas que pueden evitarse, o ¿a caso si no quieres matar lo haces a la fuerza? Tiene que buscarme verdaderas razones para caer en ello, y en verdad, tengo suficientes para soportarle disfrazado de lo que quiera, de igual manera voy a rechazarle y evitarle.
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